México va a rugir en cinco tonos distintos, porque la banda española WarCry se lanza a conquistar tierras aztecas con la segunda parte del Daimon Tour, y cada ciudad es una parada en una cruzada de puro poder metálico.
Desde León, pasando por el Estado de México, la joyita sinfonía en Monterrey, y rematando en Puebla y Querétaro, esta gira no solo es una serie de conciertos: es un mapa emocional que une a miles de fans con un solo idioma, una sola pasión y muchos decibeles.
Cada ciudad representa algo especial. En León, el Foro del Lago se convierte en un campo de batalla musical. En Monterrey, el metal se mezcla con lo sinfónico en un formato que pocas bandas se atreven a ofrecer (y mucho menos con esa intensidad). El Estado de México será testigo de la entrega total del público más aguerrido de la zona centro, mientras que Puebla y Querétaro cerrarán el tour como si se tratara de una profecía épica cumplida.
Más allá del show, lo que WarCry trae es una experiencia: un viaje emocional donde cada canción es una daga al pecho o un abrazo al alma. Desde clásicos como “Hoy gano yo” hasta lo nuevo del disco Daimon, esta gira representa una comunión poderosa entre banda y fanáticos.
Y no es casualidad que el público mexicano sea uno de los más queridos por ellos. Lo han dicho en entrevistas y lo repiten concierto tras concierto: México no va a los conciertos, los vive.
Y WarCry, con más de dos décadas de trayectoria, sabe que no se puede venir a medias: aquí se toca con el alma o no se toca.
Así que no importa si vas a uno, dos o todos los shows: cada fecha del Daimon Tour en México es una pieza de una historia más grande. Y si te lo pierdes, no lo vas a entender. Pero si estás ahí… nunca lo vas a olvidar.